La Casa de Moneda de Bélgica cierra sus puertas

La Monnaie Royale de Belgique o Real Casa de la Moneda de Bélgica, cesará su actividad al finalizar 2017 en su labor de acuñación de monedas, actividad que viene desempeñando ininterrumpidamente desde 1830 pasando por distintos nombres y desde 1969 con el actual. En 1832 se acuñaban los primeros francos belgas después de independizarse de Holanda, en 1999 se acuñaron sus primeros euros, que entrarían en circulación, como los del resto de países de la eurozona en 2002.

 Las 25 personas que trabajan actualmente en puestos relacionados con la acuñación de moneda serán recolocados en otras empresas del Servicio Público de Finanzas del país. La utilización cada vez menor del efectivo en el pago, el hecho de que las monedas de baja denominación, 1, 2 y 5 céntimos, tengan un coste de fabricación superior a su facial y la posibilidad del ahorro de costes al ser fabricadas por empresas privadas, son los principales motivos que han llevado a las autoridades a tomar la decisión. 
Durante el pasado mes de junio, desde la tienda online de la ceca se comenzó con la primera fase de liquidación de monedas en stock, poniéndose final de forma exitosa a mediados de julio. Se anuncia para septiembre la segunda fase, con la puesta a la venta de nuevas piezas hasta agotar todas las existencias.

Como dato curioso, destacar que el diseñador de la Casa de Moneda belga Luc Luycx, autor del diseño de la cara común de las monedas euro, será uno de los trabajadores a los que el gobierno belga tendrá que ubicar en un nuevo puesto, posiblemente alejado del que le dió un nombre a nivel internacional en el mundo de la numismática, y en el bolsillo de millones de personas. 

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